Help de los Beatles sonó de nuevo en la radio desgastada de la vieja habitación.Me retorcí en el suelo,en busca de la nueva máscara que se me acababa de caer.Después de aquello,pasé al cuarto de baño.El espejo estaba sucio,y pasé la manga de la camiseta limpiando una circinferencia que dejaba ver mi rostro.Me pinté los ojos con un gesto rápido y bajé las escaleras,que chirriaron con cada uno de mis pasos.De nuevo me sentí abrumada en aquellas salas.Una canción de piano sombría sacudió el edificio,seguida de la melodía de un grupo de violínes.Me agarré a la barandilla de las escaleras con un gesto rápido.Ya había pasado varias veces.Tan solo era otro de mis tantos problemas,así que cerré los ojos,cargados de lágrimas trsites,y seguí sujetando mi único apoyo.
Miedo.Sentía miedo cada vez que volvía a pasar.Y como cada noche,me encontré chillando,agarrada a la repisa de la ventana que sabía con seguridad había cerrado previamente antes de irme a la cama,con sensación de ahogo y un chillido,el mío,mi propio chillido,que me despertaba instantáneamente de cada mal sueño
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