miércoles, 13 de julio de 2011

Burn

Hemos dejado que todo se quemara.Que acabase en pequeñas cenizas color carbón.
Dejamos de hablar,de reír,de abrazarnos,de besarnos,de tocarnos,incluso dejamos de discutir,para tan solo mirarnos.
Y nos mirábamos durante mucho tiempo.Tanto que me llegaron a escocer los labios,los ojos,los pulmones.
Porque aquella sensación no podía ni tragarse ni respirarse a la fuerza.
Todo se había estancado.
¿No era a ello a lo que teníamos miedo?
¿Porqué dejamos que nos venza?
Volvemos a mirarnos,pero esta vez no hay respuesta,como otras veces.Ni siquiera te encoges de hombros,en silencio,solo miras.Y parece que ya no consigues penetrar en mi alma,o que no quieres hacerlo.Entonces,dejo de mirarte,y se rompe el pacto.Me doy cuenta de que,si no vas a quererme como siempre,prefiero no sabes que estás allí,y por eso sollozo como una niña caprichosa.
Pero me doy cuenta de algo.Las lágrimas ya no son lentas,lastimeras,no.
Ahora queman,lo hacen como nunca.Me pican,como quien mete el dedo en la llaga,me queman,demasiado.
Y tú tan solo me miras.Como una estúpida estátua inerte.Observas todo desde tu cumbre aislada de todo dolor, te levantas,cuando te digo "te quiero" y cierras la puerta.

Ahora sé que los dos no habíamos enamorado,los dos.

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