Oceans.

No estábamos hechos el uno para el otro, ni nos completábamos las frases sabiendo qué pensaba el otro, ni tuvimos una época de maravillas.Iba mucho más allá de cosquilleos en el estómago y miradas vergonzosas.
Y pensar que echaría de menos las cataratas de tus ojos, y que mordieras el lóbulo de mi oreja con prisas.En los amaneceres te esperaba y me despedía de ti cuando anochecía.Tus labios me decían buenos días, y las buenas noches me las daban tus caricias.Conseguías con solo unas pocas palabras que pudiera olvidarlo todo, que pudiera incluso escaparme contigo.Que pensara que el tiempo se habría parado para siempre, y que ese instante se repetiría una y otra vez, y otra, y otra, y otra, y otra.
Que tus ojos eran el oxígeno que permitía que siguiera viva.De cuando en cuando todo iba rápido, y en el mismo instante tan despacio, que podía contar tus pestañas, que podía besarlas, construir mis sueños por encima de ellas, unir nuestras lágrimas, desearte una y otra y otra, y otra.Cuéntales a las hojas de otoño que ,batías tus miedo con tu risa y se convertía en brebaje mágico.Eras tú, especial entre especiales.