Y acabó siendo un doce.Digamos que para escribir cartas no soy tan puntual.
<<Lo que me llamó la atención de ti, fueron tus ojos.No puedo describirlos con una pluma, papel y tinta, lo siento.Son algo ahora mismo esencial.Me envían mensajes sobre cómo te sientes, como estás, de qué te preocupas.
El invierno a venido a traernos aún más motivos.Motivos para perdernos en los pliegues de las partituras, y robar la luna algunas horas.Componer canciones de piano que solo puedan tocarse a las tres de la mañana con mi cabeza apoyada en tu cuello, y embotellar lágrimas, solo para liberar los deseos y sueños que encerramos un día en botes de mermelada, como yo quería.
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