Él,mi mente.

Azules.Un azul cielo incluso escandaloso.Es un iris precioso.En él flotan pedazos de espejo roto,o de estrellas,que le dan un brillo singular.El negro de tus pupilas queda reducido a nada cuando empequeñecen y dejan todo su esplendor al azul.En cambio,cuando se dilatan,incluso dan miedo.Dejan tan solo una franja circular alrededor,del mismo color,igual de bonita.
Cuando la comisura de sus labios se curva para formar una sonrisa perfecta de labios carnosos y rojizos,brillan todavía mas,mucho más,más,más,más.
Nariz recta,proporcional.
Sonrisa que suele brindarme felicidad,una y otra vez,sin parar.Cada risa que sale de esa boca me deja feliz durante un periodo de tiempo incalculable.A veces es fría,igual que su mirada,y a veces,puede conseguir que te derritas,sin ningún esfuerzo.Tú solo espera a que lo haga.
Suele morderse el labio inferior a menudo.Cuando ser nervia,cuando no se encuentra bien.Pero cuando tiene ganas de llorar,esconde su bonito rostro,y de nuevo me recuerda a un niño.Ojalá lo fuera de nuevo,ojalá.
Le tiemblan las manos cuando lo hace.Y yo le digo que todo irá bien,le beso el cuello,le acaricio hasta que consigue acallar su llanto,y entonces sonríe de nuevo.

Pero no sé donde está.Ya no.No puede haberse ido,si nunca estuvo conmigo.Seguramente estará de camino con su cabello de color carbón,seguramente.Él y todos.Todos están de camino,y a mí también me están esperando.