Aquella vez,cuando yo me enamoré

Podría pasarme horas observando el pálido rubio de su cabello.Entrelazaba los mechones entre mis dedos,y después deshacía los nudos con la misma delicadeza.Nadaba entre el azul de aquellos ojos chocantes que de noche y de día me embrujaban,bebía del contorno de unos labios perfectos,carnosos,nuevamente perfectos.
Y me derretía junto a ella.
Podía saborear sus palabras, en  un intento de cumplir todos mis deseos infantiles,como tocar el cielo con los dedos,como atrapar la cola de una estrella fugaz,como dormir en cualquier lugar desde donde se pudiera oír el mar.
Y cuando estaba con ella no podía reprimir la lluvia de mis ojos si tenía que pedir perdón.
Y no soportaba hablar de ella con nadie.Quería que fuera mía,mía,mía,desde el momento en que me di cuenta que lo que sentía era mágico.
Y cuando sus yemas acariciaban mi rostro,notaba como los músculos se ponían tensos,muy tensos,y después se relajaban.Y así una y otra vez,añadiéndole los escalofríos en la columna,manos,pies,espalda,etc.
Y cuando hablábamos el mundo dejaba de existir,solo estábamos ella y yo.Sus abrazos,y yo.Sus besos,y yo.Sus ojos,y yo.Sus palabras,y yo.Su llanto,y yo.Su sufrimiento,y yo.Siempre,en el mismo universo,flotando entre nuestras risas espontáneas.
Ambas.
¿Que cómo me sentía del uno al diez?
"Once y ascendiendo",le dije."Once y ascendiendo,te quiero.."
Y todo eso ocurrió aquella vez,aquella vez cuando me enamoré de ella.